Diseño web sostenible es hacer sitios livianos, rápidos y responsables — que cuidan tanto a los usuarios como al planeta.
¿Cómo puede aplicarse el diseño sostenible?
No se trata solo de usar hosting “verde” (aunque suma), sino de reducir todo lo innecesario: imágenes pesadas, scripts inútiles, fuentes raras que nadie pidió. Menos bytes, menos consumo de energía. También incluye diseño duradero, que no obliga a rehacer todo cada seis meses, y accesibilidad para que más personas puedan navegar sin trabas.
Si alguna vez abriste una web en el bondi y te tardó tanto que te bajaste antes de ver algo — eso es lo contrario a diseño sostenible. Lo bueno es cuando el sitio carga al toque, no gasta batería y se ve bien sin dramas.
Un buen lugar para arrancar: LaWebVerde