¿Cuándo fue la última vez que pensaste cuánta energía consume tu sitio web, app o producto digital? Si tu respuesta es “nunca”, no sos el único. La mayoría de los desarrolladores y diseñadores se centran en la velocidad, la usabilidad y la estética, pero pocos consideran el impacto ambiental de sus creaciones. Sin embargo, cada interacción en un sitio, cada clic, scroll o carga de imagen, demanda energía de servidores, redes y dispositivos de los usuarios. Y con miles de millones de interacciones digitales cada día, ese consumo energético se acumula rapidísimo.
Entonces, ¿cómo pueden ayudar el diseño y la experiencia de usuario a reducir la huella de carbono de internet? Veamos.

1. Simplificá y optimizá, porque menos es literalmente más
Cada elemento innecesario en una página implica datos extra, lo que se traduce en más consumo energético. Los diseños simplificados e intuitivos no solo mejoran la experiencia de los usuarios, sino que también reducen la cantidad de pedidos al servidor. Así es como funciona:
- Menos clics, más eficiencia: un proceso de checkout o registro simplificado no solo reduce la fricción, también disminuye la cantidad de solicitudes que un servidor debe procesar.
- Interfaces minimalistas: una interfaz limpia y liviana implica menos elementos para cargar, lo que mejora el rendimiento y reduce el consumo de energía.
2. Medios pesados = alto consumo energético
Los videos de reproducción automática, las imágenes en altísima resolución y las animaciones exageradas pueden parecer sofisticados, pero también consumen mucha energía. Mantené el diseño ágil sin perder calidad:
- Comprimí, comprimí, comprimí: imágenes y videos optimizados (como en formato WebP o AV1) mantienen tamaños de archivo livianos sin afectar la calidad visual.
- Evitá la reproducción automática siempre que sea posible: no todo tiene que reproducirse automáticamente. Dale el control al usuario, y de paso ahorrás energía.
3. El modo oscuro no es solo una tendencia, también ahorra energía
El modo oscuro no solo cansa menos la vista, también ahorra batería, sobre todo en pantallas OLED y AMOLED. Ofrecer esta opción de pantalla de bajo consumo no solo beneficia al usuario, también es un pequeño pero significativo paso hacia la sustentabilidad.
4. Fomentá hábitos digitales más inteligentes
Un buen diseño UX no solo guía a los usuarios, también puede ayudar a que sus hábitos digitales sean más eficientes. Algunas ideas:
- Funciones offline: el caché y el contenido descargable reducen las interacciones innecesarias con el servidor.
- Alertas de uso: informá a los usuarios cuando su navegación o uso de la app esté consumiendo muchos datos (y energía).
5. Elegí bien tu proveedor de hosting
Los servidores no funcionan por arte de magia, consumen una tonelada de electricidad. Y si esa energía viene de combustibles fósiles, es una pésima noticia para el planeta. Siempre que se pueda, optá por proveedores de hosting sustentables que usen energía renovable. Además, un código eficiente y buenas estrategias de caché reducen la carga sobre los servidores y ahorran energía.
Una mirada más amplia: diseñar teniendo en cuenta la sostenibilidad
Pequeños cambios en la experiencia de usuario (UX) y el diseño, multiplicados por millones de usuarios, pueden tener un gran impacto. La web consume muchísima energía, pero quienes diseñamos y desarrollamos tenemos el poder de reducir esa huella. Pensar en verde no es solo una cuestión ética, también es diseño inteligente.
Preguntas frecuentes
1. ¿Cómo impacta el diseño UX en el consumo de energía de un sitio?
Cada elemento en una página web, como imágenes, animaciones, scripts o la cantidad de clics, afecta cuántos datos tienen que procesar los servidores y los dispositivos de los usuarios. Cuanto más complejo y pesado sea el sitio, más energía consume. Un diseño UX pensado con conciencia puede minimizar interacciones innecesarias y reducir la carga de datos, lo que disminuye el consumo energético.
2. ¿Cuáles son las formas sencillas de hacer un sitio web más eficiente energéticamente?
Algunos pasos rápidos incluyen:
- Optimizar imágenes y videos usando formatos modernos como WebP.
- Habilitar el modo oscuro en pantallas OLED.
- Reducir la cantidad de pedidos al servidor simplificando la navegación.
- Usar proveedores de hosting ecológicos que trabajen con energías renovables.
3. ¿El modo oscuro realmente ahorra energía?
¡Sí! En pantallas OLED y AMOLED, el modo oscuro reduce significativamente el consumo de energía porque los píxeles negros se apagan. Esto no solo extiende la duración de la batería en dispositivos móviles, también mejora la experiencia visual en ambientes con poca luz.